Bienvenidos a Encuentros de Cine, un pequeño rincón cinéfilo ...

23 diciembre, 2012

”Una pistola en cada mano”, de Cesc Gay


Cesc Gay regresa a las carteleras tres años después de su último trabajo, ‘V.O.S’. Ahora llega con ‘Una pistola en cada mano’, un título repleto de grandísimos actores: Ricardo Darín, Luis Tosar, Javier Cámara, Leonor Watling, Eduardo Noriega o Candela Peña son algunos de ellos.
El director catalán se ha distinguido hasta el momento por ser un gran creador de diálogos. Sus películas, ágiles, cercanas y muy actorales, han pasado en ocasiones injustamente desapercibidas. Si no han generado tanto ruido como la actual ‘Una pistola en cada mano’, tal vez sea fruto de ese conocidísimo reparto.


Desde luego, esperábamos encontrar en el nuevo filme, por lo menos, esas mismas virtudes que caracterizaran su filmografía. Pero no ha sido así.
‘Una pistola en cada mano’ cuenta, como si de pequeños capítulos se tratara, instantes vitales de ocho personajes masculinos. Un retrato psicológico que, de no haber sido tan excesivamente troceado, tal vez hubiera resultado eficaz. Porque así, contadas una detrás de otra – ¿por qué no intercalarlas, por ejemplo? – las historias se pierden en diálogos hechos a medida, previsibles, e incluso, por momentos, largos y aburridos. Partiendo de un guión que, de no ser por la maravillosa interpretación de los actores, hubiera resultado casi ridículo, Cesc Gay logra mediante una fresquísima dirección de actores ofrecer la verosimilitud necesaria. Pero no suficiente.

Por otro lado y, aunque desde luego intencionado, la idea de retratar ferozmente a los hombres como seres inmaduros, perdidos, infieles o mentirosos; frente a las mujeres, tan seguras, maduras y maternales, no ayuda a la hora de dotar a las historias de una mayor verosimilitud. Todo lo contrario. Genera artificialidad y repetición.
El problema de ‘Una pistola en cada mano’ es que no hallamos un sentido claro al conjunto de historias, puesto que cada una de ellas, sin comienzo ni final, termina perdiéndose y empequeñeciendo el todo. Cesc Gay ha perdido en esta película la frescura y el ritmo al que nos tenía acostumbrados, tan cercano al más puro estilo Woody Allen.

Clara Martínez Malagelada
Publicado el 19 de Diciembre en la Revista
Under Magazine

No hay comentarios: